En la entrada de hoy vamos a hablar sobre la comida vietnamita.
Hablaremos de la riqueza de su base alimenticia y de alguna receta fácil de realizar en casa.
Si hay algo de lo que carecemos en Vietnam, frente al resto del mundo, es de personas obesas.
Nuestra alimentación está basada en ingredientes frescos y sabrosos, lo cual nos permite tener una intensidad de sabores únicos en el mundo. Con ingredientes como la menta, los brotes de soja, la espinaca de agua, salsa de pescado, la comida vietnamita es bastante fácil de trasladar y realizar en nuestra casa.
Hay cinco sabores esenciales que rigen nuestra comida: picante, agrio, amargo, salado y dulce; es muy importante conseguir el equilibrio entre ellos.
Un dato curioso en la cocina vietnamita es que hay siempre cinco colores presentes en todos sus platos: blanco, verde, amarillo, rojo y negro. Todo se complementa en nuestra gastronomía para atraer a los cinco sentidos por medio de multitud de hierbas aromáticas con texturas crujientes.
Cocinar siendo conscientes de la salud
El número cinco vuelve a hacer acto de presencia de nuevo si tenemos en cuenta que la mayoría de los ingredientes de nuestra cocina se eligen en base a los beneficios que estos tienen para la salud, concretamente para cinco órganos: la vesícula biliar, el intestino delgado y grueso, el estómago y la vejiga.
Es por esto por lo que nuestra gastronomía está considerada de las más saludables del mundo.
Nuestros platos apenas contienen gluten, son bajos en grasas y aportan vitaminas y minerales esenciales para nuestro organismo. La menta, uno de nuestros ingredientes preferidos, ayuda junto con el cilantro a realizar la digestión más fácilmente.
¿Eres buen cocinero/a?
Actualmente ya no es necesario tener grandes conocimientos para realizar una buena labor en la cocina y preparar nuestros mejores platos.
Un gran aliado son los robots de cocina, con los que siguiendo sus recetarios podemos convertirnos en un auténtico cocinero de estrella Michelín.
Estos robots, algunos incluso con conexión a Internet, nos permiten cocinar (a los que somos algo más torpes) como verdaderos profesionales de la alta cocina.
De todas formas, nuestra cocina es fácil de elaborar y con una sencilla vaporera o arrocera, podemos realizar el 90% de nuestros ricos platos.